Caracoles!!

Caracoles.

Conejo con caracoles

Caracolillos con caldo

Están de muerte...y ese ruidillo al churrupar un caracol..mmmmm...mmmm

Hay a quin le dan asco los caracoles solo porque cuando estaban vivos se arrastraban y babeaban....

Jamás los he probado ni tengo intención....también es cierto que nunca he tenido oportunidad. No recuerdo haber visitado ningún restaurante que los tuviese en la carta...y es que aquí para bichos feos preferimos unas nécoras o unas centollas... 

Aquí cerca, en Santako, es tradición ponerse hasta el culo de caracolillos como aperitivo. A mi me gustan, tanto a La LLauna como a la Borgoñona.

Los bigaros saben a mar, luego no difiere el sabor de otros moluscos marinos y los caracoles a tierra que tiran pa tras, por lo que hay que hacer que sepan a salsa.. De tierra sólo he comido caracoles chicos, no el caracol de jardín, más grande y baboso, aunque supongo que saben igual o más a tierra si cabe.

Los caracoles, por sí solos, son bastante sosos. Una vez los probé a la manera francesa, con mantequilla y poco más, y no tenían demasiado aliciente. Sin embargo, soportan maravillosamente las salsas, sobre todo con un poquito de picante...  

Aún dándome un asco horroroso los probé dos veces, y tenían un sabor a tierra tan desagradable que mi repugnancia creció todavía más. Pero tiene que haber formas de prepararlos que los hagan más tragables (ya que le gustan a demasiada gente y a mí me gusta casi todo).

Cosso escribió:Los bigaros saben a mar, luego no difiere el sabor de otros moluscos marinos

Mención especial se merecen las cañaíllas, esas caracolas marinas con pinchos que simplemente cocidas con un poco de sal y una hoja de laurel están de hablar con dios de tú a tú.

Oh Cañaíllas!!! Que ricas por favor!

Y caracoles y cabrillas!!!

Y yo dandole vueltas a lo de la granja de caracoles....

Jose escribió:Los caracoles, por sí solos, son bastante sosos. 

Sí, ese es el problema, que como te pongan una salsa mal hecha no saben a nada. En Albacete, de Mayo a Agosto (más o menos) ponen en el paseo de la Feria un montón de tascas a las que se les llama coloquialmente "los caracoles", porque todas tienen y son el plato estrella. Se piden dos platos de caracoles "pa empezar" y luego ya se mira la carta". He intentado espantar a base de caracoles, morcilla, oreja y rabo a mi novio, al novio de mi hermana y a todo extranjero que me ha visitado, pero acababan pidiendo más.
Eso sí, me gustan más los pequeñitos. Los grandes ya casi me dan un poco de cosica.
Me habéis dado hambre de caracoles a las 6 de la mañana.